LA sonrisa

 Muy buenas tardes, queridos pasajeros de este, el mejor bus de Latinoamérica.

Me presento con todo respeto y humildad: no vengo a pedir, sino a ofrecerles un producto.

Directamente de fábrica, sin intermediarios, sin aumentos, sin impuestos… y por el módico precio de una sonrisa.

Así es, para conveniencia del caballero y la cartera de la dama, lo que ofrezco no ocupa espacio ni necesita pilas:

historias y cuentos.

De todos los sabores: comedia, drama, y uno que se está vendiendo mucho… el de reflexivos.

Les voy dejando por acá una muestra, para que ustedes puedan comprobar la calidad del producto.

Pueden compartirlas, guardarlas o simplemente quedárselas en el corazón.

No pido monedas. Solo pido eso que está haciendo falta, pero abunda cuando se contagia: una sonrisa.

Queda en ustedes, señores pasajeros, tener un excelente día.

Gracias por su tiempo y por viajar en este bus.